Las nuevas etiquetas de los combustibles
Un círculo para representar la gasolina y un cuadrado para el diésel
Los vehículos eléctricos aún no tienen una etiqueta aplicable
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A partir de hoy, si acude a repostar verá unos nuevos adhesivos en los surtidores de las gasolineras. Se trata del etiquetado europeo de combustibles, que busca familiarizar a los consumidores con los carburantes alternativos, unificar la clasificación de los mismos a nivel continental y saber cómo de verdes son.
Cómo leerlo
Para una interpretación rápida: la gasolina se identifica con un círculo, el diésel con un cuadrado y los combustibles gaseosos, con un rombo. Dentro de cada forma habrá unas letras y números que indican la cantidad de etanol (gasolina) y biodiésel (gasóleo) que lleva; o el tipo de gas por sus siglas en inglés: LGP, gas licuado del petróleo; LNG, gas natural licuado; y CNG, gas natural comprimido. Existen otros como XTL, un diésel que no deriva del crudo del petróleo pero que apenas se vende aquí.
Equivalencias
El etiquetado no modificará los hábitos actuales, que permiten escoger entre combustibles de menor o mayor calidad. Ahora, además, el conductor podrá considerar la variable ecológica y, en lugar de una gasolina E5, optar a la E10 más limpia. O viceversa. Y lo mismo ocurre con el diésel. Asimismo, los nuevos adhesivos convivirán con las denominaciones comerciales de cada operador. Pero no busque una equivalencia entre esta clasificación y la que ya existía.
Así, por ejemplo, en una estación le pueden servir gasolina de 95 octanos que está etiquetada como E10 y en la de otro operador, el mismo combustible puede ser E5. Lo mismo ocurre con el gasóleo: uno premium puede variar de una gasolinera a otra entre el etiquetado B7 y el B10. Y es que conviene recordar que los combustibles premium actuales no lo son por su componente ecológica, sino por una formulación enriquecida que permite recorrer más kilómetros, mejorar las prestaciones y proteger el motor. Los operadores ya han aclarado que los productos que sirven no cambiarán.
Para toda Europa
Una de las razones del nuevo sistema es que sea único para toda la UE, más Islandia, Liechtenstein, Noruega, Macedonia, Serbia, Suiza y Turquía. Así, se podrá repostar en cualquiera de estos países sin necesidad de entender el idioma local y sin error. Reino Unido decidirá cómo aplica la norma tras el Brexit, pero los nuevos vehículos que se fabriquen allí llevarán etiqueta.
Vehículos
El etiquetado, además de en las gasolineras, deberá estar visible en los coches que sean de nueva comercialización o que se matriculen. Estará situado en la proximidad del tapón de llenado o de la tapa del depósito. También debe aparecer en el manual del vehículo y en la información que ofrece el concesionario. La nueva nomenclatura afecta a motos, turismos, furgonetas, camiones, autobuses, etc.
Coches antiguos
¿Y qué pasa con los vehículos que ya están en circulación? No llevarán adhesivo y los fabricantes no recomiendan colocar las etiquetas. En caso de necesitar asesoramiento, se insta a consultar al concesionario más cercano. Deberán comprobar la información de los combustibles en el cuerpo del surtidor y en sus boquereles.
Eléctricos
Si usted tiene un vehículo híbrido, normal o enchufable, no tendrá una etiqueta específica. Se regirá por la correspondiente al tipo de combustible que use el motor de combustión (gasolina o diésel) del coche. Actualmente, la UE trabaja en una norma que establezca las características de la etiqueta aplicable a los automóviles 100% eléctricos y sus puntos de recarga.